jueves, 28 de abril de 2011

Érase una de miedo que pudo ser peor

Bueno ya pasó el miedo de ayer, ya que esta mañana he tenido la famosa reunión.

El asunto de la reunión era informarnos de que en mi consultora de 4.000 trabajadores han creado una filial a la que nos envían a las 100 personas que trabajamos para empresas del mismo sector que la gran empresa para la que yo trabajo.

Como siempre, han tratado de vendérnoslo todo muy bonito, como una gran oportunidad para nuestra carrera profesional. También nos han dejado caer que lo más probable es que nos saquen de los puestos en los que llevamos años estancados y, aunque sigamos trabajando para la misma empresa o para otras similares, los nuevos proyectos serán mucho más especializados y en gran medida, más internacionales.

Sin ir más lejos, tengo un compañero que se acaba de quedar sin trabajo en la gran empresa y al que ya le han preguntado directamente si le importaría irse a formar durante 3 meses a Argentina, para posteriormente trabajar a temporadas lejos de tierra firme. Y creo que lo que pretenden con el resto va por parecido camino.
Pero esto ya es hablar a muy largo plazo, de momento, todo sigue igual.

Lo principal que querían transmitirnos es que no nos asustemos cuando la semana que viene nos llame alguien de recursos humanos para que pasemos a firmar el finiquito, porque es un trámite administrativo. Nos liquidan la parte de la paga extra de la actual empresa y en el acto firmamos la subrogación del contrato con la nueva empresa. Eso sí, manteniendo todas las condiciones actuales. Habrá que leerse bien las cosas antes de firmar, que luego pasa lo que pasa.

La parte mala, o buena según se mire, es que todavía tenía pendientes 3 días de vacaciones del año pasado y me los tengo que pillar ya, así que toca improvisar algún viaje express y, si el tiempo lo permite, que no parece que está muy por la labor, estaré fuera hasta el próximo miércoles.

A la vuelta me tocará solucionar todo el papeleo, presentarme ante el nuevo jefe para contarle un poco mi vida, obra y milagros conocimientos y volver a la rutina diaria.

Me queda el consuelo de que podía haber sido peor.

miércoles, 27 de abril de 2011

Érase una de miedo

Acabo de recibir un escueto mail de mi jefa que me ha metido el miedo en el cuerpo.

Como ya comenté en su día, trabajo en una consultora informática que nos tiene abandonados a nuestra suerte en una gran empresa, para la que realmente realizamos nuestro trabajo. Es una especie de subcontratación encubierta. El nombre técnico que le ponen cada vez que algún compañero lo denuncia ante la inspección de trabajo es cesión ilegal de trabajadores.

En la gran empresa tengo mi jefe, con el que tratamos los temas del trabajo del día a día, lo que hay que hacer, para cuándo, cómo,... y en la consultora tengo una jefa a la que con suerte veo dos o tres veces al año y con la que tratamos los asuntos de ascensos, salarios, vacaciones, ...

A la consultora he tenido que ir en contadas ocasiones, generalmente a recoger algún documento o la cesta de navidad. Pero nunca me han convocado a una reunión allí... hasta hoy.

En el correo que hemos recibido casi todos los compañeros de mi empresa que estamos aquí desplazados, se nos convoca a una reunión urgente que tendrá lugar mañana mismo, para informarnos de una "decisión empresarial que nos afecta" y, con la dichosa crisis que tenemos encima y que parece que nunca se acaba, nos ha dejado a todos muy acojonados.

La consultora tiene ahora mismo unos 4.000 trabajadores, pero está con un ERTE, de forma que si alguno de los trabajadores nos quedamos sin cliente para el que trabajar, nos mandan al paro hasta que aparezca uno nuevo, pero con el salario íntegro, pagado del bolsillo del resto de ciudadanos, gracias a las medidas adoptadas para ¿fomentar el empleo?

Aún a pesar del ERTE, también se están produciendo despidos, cosa que es ilegal, pero los están llamando eufemísticamente "Bajas Voluntarias Pactadas" y asunto resuelto.

Los despidos, por lo menos hasta ahora, han sido de gente que llevaba largas temporadas sin cliente, pero no es nuestro caso, porque nosotros estamos en esta gran empresa.

Otra cosa es que también la gran empresa está prescindiendo de algunos trabajadores externos, incluso en algunos casos de la noche a la mañana. Tengo compañeros que se fueron de aquí como siempre hacia las 6 de la tarde y una hora más tarde, recibieron una llamada diciéndoles que al día siguiente no volviesen por aquí y no pudieron ni entrar a recoger sus cosas, ya que el edificio inteligente no les dejó. Tuvieron que ser sus compañeros los que se lo recogieron y se lo acercaron a la puerta.

Así que no sabemos lo que nos espera. Si se habrán terminado los 5 años en este cliente, en esta empresa o las dos cosas, poniéndonos en lo peor. Aunque igual es algún cambio de jefe o alguna chorrada de menor importancia... Qué incertidumbre!!

Seguiremos informando.

martes, 26 de abril de 2011

Érase un desgobierno local

Hoy me voy a meter en un tema que en algunos blogs se toca mucho y del que en otros, como el de Pimpf, no se habla nunca: la política.

Pero tranquilos, que mi don es la diplomacia y no quiero mostrar mis ideas políticas, por lo menos muy claramente, de momento. De lo que voy a hablar es de la historia política de mi pueblo.

El Ayuntamiento
Desde que volvió la democracia, se puede decir que en mi pueblo siempre han gobernado los mismos, aunque no bajo las mismas siglas y no siempre de la misma manera.

La verdad es que yo nunca he votado en las elecciones municipales de mi pueblo, primero porque no tenía edad y después porque fue cumplir los 18 y empadronarme en Bilbao (para conseguir una subvención) y más tarde en Madrid (para escapar de la justicia, algún día lo contaré) así que no tengo nada que ver con lo que voy a contar.

Cuando yo era pequeño, teníamos un alcalde del PSOE que, tanto desde mi punto de vista de niño-adolescente, como ahora visto con el tiempo y la distancia, se puede decir que hacía las cosas bien.

Nos llevó a ser el tercer pueblo en importancia de Cantabria, fuimos de los primeros en tener recogida selectiva de residuos, fue el alcalde de España que más aceras construyó en una legislatura (la oposición se burlaba de él por ese hecho), tuvimos la primera bolera cubierta de bolo-palma (que desde fuera sonará a chino, pero allí es un deporte importante), creó escuelas deportivas de casi todas las disciplinas imaginables, escuelas públicas en cada pueblo (el municipio se compone de 8 pueblos), polideportivos en casi todas ellas, un centro cultural de referencia en la provincia, la primera escuela de medio ambiente de España...

Un montón de cosas (la verdad es que había mucho por hacer) y supongo que no todas ellas dependían de él directamente, porque para algunas también haría falta el apoyo del Gobierno Regional e incluso del Central, pero estoy seguro de que impulsó todas estas que he puesto y muchas más, en la medida de sus posibilidades.

Pero hete aquí que este hombre, tras llevar al pueblo a la prosperidad, fue tentado por su partido para presentarse a las elecciones autonómicas, por lo que dejó la alcaldía tras 16 años al frente.

Fue en las elecciones del 99. En aquellas elecciones autonómicas, el PSOE no se comió un colín, pero en las municipales de mi pueblo, volvió a ganar con la mayoría absoluta de siempre. El candidato fue el que en los últimos años había sido la mano derecha del alcalde, pero lejos de seguir sus pasos, este hombre se dedicó a vivir de las rentas, fue incapaz de sacar adelante el Plan General de Urbanismo e incluso se vió envuelto en algún escándalo a nivel local, que propició su dimisión poco antes de agotar la legislatura.

En el PSOE local, tras destaparse los escándalos del alcalde se creó un cisma interno, que se vió agravado al nombrar como nueva alcaldesa a una joven política totalmente inexperta, que se convirtió en la alcaldesa más joven de España.

A la vez que esta mujer, casi sin comerlo, ni beberlo, se vió sentada en un sillón que con los años se demostró que le quedaba muy grande, unos cuantos militantes del PSOE descontentos con el rumbo que seguía su partido, formaron su propia escisión: Alternativa de mi pueblo Progresista.

En las elecciones del 2004 se presentó por el PSOE la misma que ocupaba accidentalmente el puesto de alcaldesa y el alcalde que había llevado durante 16 años las riendas del pueblo, decidió apartarse de la política.

El PSOE volvió a ganar aquellas elecciones, pero lejos quedaba ya la mayoría absoluta, entre otras cosas porque tras el desastre del equipo de gobierno anterior, tanto PP como PRC (el de Miguel Ángel Revilla, el que está todo el día en la tele) habían sumado votos. Incluso la escisión del PSOE consiguió dos representantes.

En aquella legislatura se puede decir que el pueblo quedó desgobernado, ya que el equipo de gobierno era incapaz de conseguir pactos para sacar adelante ningún proyecto. El pueblo seguía sin Plan de Urbanismo, por lo que no se creaba nuevo suelo industrial, ni nuevas infraestructuras, ni nada... Y mientras, los pueblos vecinos nos adelantaban en todos los ámbitos, sobre todo en ayudas del Gobierno Regional (por ser alcaldes y presidente autonómico del mismo partido).

Tras aquellos annus horribilis, el PSOE local se terminó de debilitar, mientras que la Alternativa de mi pueblo Progresista consiguió el apoyo del antiguo alcalde (el de las aceras) y con él como cabeza de cartel, se presentaron a las últimas elecciones y ganaron.

Ganaron, pero otra vez sin mayoría absoluta y otra vez incapaces de sacar al pueblo del estancamiento, demostrando que aquel hombre que llevó al pueblo a la gloria, no debió volver a la política.

Después de llevar toda la legislatura sin conseguir sacar adelante ningún proyecto, la sorpresa llegó hace unos meses, cuando este hombre decidió que se querían volver a unificar bajo las siglas del PSOE y más sorpresa todavía cuando la junta local del PSOE lo admitió y el remate, cuando decidieron que el cabeza de lista volvería a ser este hombre.

Aquello causó malestar en todas partes. En el PSOE mucha gente no vió bien que se abrieran los brazos a los hijos pródigos y muchos fundadores de la escisión tampoco vieron bien volver a filas socialistas. Hubo dimisiones de concejales de uno y otro bando, así como de miembros de órganos de gobierno y comisiones menores. Y en medio del caos y gracias a las nuevas sinergias, va y se da luz verde a todo correr al dichoso Plan de Urbanismo que llevaba tantos años en un cajón.

Y así estamos ahora mismo, con el Plan General de Ordenación Urbana en exposición pública para que se puedan realizar las alegaciones oportunas. Con el PSOE a medio unificar con la extinta escisión, con los rebotados de uno y otro lado pensando si fundar un nuevo partido (o dos, ya puestos), con Izquierda Unida prácticamente desconocida en el pueblo, con el PP con su cabeza de lista también joven e inexperto (lo que no trae buenos recuerdos) y con el PRC invariable desde que tengo uso de razón, siempre con la misma concejala.

A ver con estos mimbres, que cesto sale en las próximas elecciones.

lunes, 25 de abril de 2011

Érase una Semana Santa pasada por agua

La verdad es que la entrada de hoy promete ser como ha sido para mí esta Semana Santa, aburrida, así que no os culparé si pasáis de leerla.

Estos 4 días de fiesta se pueden resumir en: lluvia, obras, un musical y centros comerciales.

Desde el mismo miércoles por la tarde todo ha estado pasado por agua. Cuando llegamos a casa esa noche estaba lloviendo dentro del garaje, lo que no hacía presagiar nada bueno. Los ascensores no funcionaban y al ir ascendiendo por las escaleras, nos encontramos con el portero que estaba achicando agua del portal, que estaba totalmente inundado.

Nos explicó que había caído una tromba muy fuerte y que las alcantarillas de la urbanización no daban a basto a tragar tanto agua, así que como nuestro portal está cuesta abajo, ya os podéis imaginar dónde acabó todo ese agua.

Entró por el portal y se filtró por donde pudo. Por el hueco de los ascensores, hasta que se inundaron y dejaron de funcionar hasta hoy y por las juntas de dilatación del edificio que coinciden encima de los garajes y de algunos trasteros. Afortunadamente nuestro trastero no sufrió daños.

Cuando ÉL me comentó lo de irnos a vivir a su viejo piso, yo prefería seguir viviendo de alquiler en el mío de nueva construcción, pero visto lo visto cada vez me voy haciendo más a la idea de que el cambio va a ser bueno.

En el apartado de obras, ya hemos terminado otra estancia, el baño, que se suma a la cocina que fue la primera en estar lista. Así que ya tenemos dos necesidades básicas cubiertas: comer y cagar.

También hemos tomado otra decisión que me hace respirar un poco más tranquilo. Vamos a tratar de acabar con el gotelé. Hemos empezado por hacer una prueba y parece que sale fácilmente, así que será cuestión de paciencia y ya veremos cómo nos las apañamos para alisarlo luego.

Las visitas a los centros comerciales de este fin de semana, especialmente de bricolage y muebles, nos han servido para hacernos una idea de cómo amueblar nuestra habitación. Ya tenemos más o menos decidido que van a ser en blanco y abedul y la pared probablemente será gris.

Y dejo para el final la reseña a la única distracción que hemos tenido en este puente, que ha sido el musical Avenue Q.

Ya habíamos visto esta obra en una versión amateur que montaron en el grupo de teatro de la Complutense unos amigos de ÉL. De aquella versión se hicieron 4 ó 5 funciones en el salón de actos de una facultad (no recuerdo cuál) y salvo por el lugar, podría haber pasado por un montaje profesional.

Tanto es así que por aquel entonces estaban preparando la versión que vimos el viernes y los productores amenazaron con denunciar, por un tema de derechos, a aquellos aficionados que con más ilusión que medios se curraron desde la traducción y adaptación al castellano, hasta la escenografía.

Finalmente creo que llegaron a un acuerdo y los aficionados les cedieron a los profesionales los textos y materiales que habían preparado para evitar la denuncia, aunque después de haber visto la obra, dudo que los utilizaran.

Las dos versiones me han gustado mucho, aunque es evidente que en la que se puede ver en el Nuevo Alcalá, cuentan con muchos más medios. Un detalle que me gustó mucho más de la versión amateur fue que el personaje de niño prodigio que utilizaron fue Macaulay Culkin, creo que mucho más conocido en España que el utilizado en la versión profesional, que al igual que en el musical original, es Gary Coleman.

Finalmente me queda comentar que, aunque no somos muy dados a las citas de parejas y sobretodo que no me gusta mezclarlo a ÉL con cosas del blog, en esta ocasión fuimos muy bien acompañados por un bloggero y su él respectivo. Encantado de conoceros y cuando queráis repetimos.

Y de postre, si soy de capaz de ponerlo, que nunca he puesto un vídeo por aquí, la canción principal del musical. Qué mierda ser yo!!

miércoles, 20 de abril de 2011

Érase unos planes para la Semana Santa

Había dicho que no pensaba poner por aquí más planes a futuro, porque creo que se gafan, pero total a peor no pueden ir los de esta Semana Santa.
Hay que ver lo que ha tardado en llegar este año la primera luna llena de la primavera, la que marca la Semana Santa en el calendario con esos dos días rojos, ó 3 para los afortunados que tienen el lunes de pascua como festivo.

Pero a pesar de que este año la Semana Santa sea tan tarde, el tiempo parece que no da tregua y se presenta lluvioso por toda la geografía nacional.

El tener una casa con ruedas da mucha libertad a la hora de elegir destino vacacional. Para estos días, aunque me apetecía bajar para el sur, al Cabo de Gata o a la Costa de la Luz, no tenía nada decidido en firme y pensaba mirar el mapa del tiempo y marchar para allá donde fuese a hacer bueno durante los 4 días, pero va a ser que ese lugar no existe. Cuando en un sitio no dan lluvia para un día, la dan para otro y así no apetece salir de casa.

Y eso es lo que finalmente haré, quedarme en Madrid. No tengo ningún plan en concreto, aunque en esta ciudad siempre hay cosas por hacer.

Supongo que dedicaré tiempo a la reforma del piso, que lleva unas semanas parada. A ver si de una vez me animo a poner la mampara de la ducha, que lleva ya un montón de tiempo comprada. También puede que empecemos a pintar o hacer pequeñas chapucillas que quedan pendientes. Pero tampoco me apetece mucho la verdad, aunque es bueno ver cómo el lugar se va convirtiendo en algo cada vez más habitable.

Otros planes son ir a ver alguna obra de teatro o algún musical. El primer candidato creo que es el musical Avenue Q, que lo ví hace no mucho en una buena versión amateur y quiero ver ahora el montaje profesional, para comparar si es más importante la ilusión que pusieron nuestros amigos, o el poderoso cabellero don dinero.

Y poco más tengo planeado. Lo dicho, espero que no se tuerza nada de lo que he puesto y si se tuerce, que sea a mejor, que es bastante fácil.

martes, 19 de abril de 2011

Érase mi relación con la Iglesia

Como estamos en unos días de recogimiento y oración, hoy voy a aprovechar para comentar mi relación con la Santa Madre Iglesia.
Soy Católico porque mis padres me bautizaron, pero no sería justo echarles la culpa sólo a ellos, ya que yo ya era más o menos consciente cuando hice la primera comunión, aunque los regalos pesan mucho a la hora de decidir si hacerla o no. Lo que definitivamente es responsabilidad mía es el haberme confirmado con 16 años, porque a esa edad ya uno decide bastante libremente y encima, por lo menos en mi caso, no hay regalos que usar como chantaje si lo haces.

Mi padre, a pesar de que tanto él como toda su familia son cofrades de la Virgen del Carmen, es como muchos de esos que salen llorando estos días porque no pueden procesionar, que sólo se acuerda de su fé un día al año, vamos que no es nada practicante. Mi madre en cambio es de acudir cada domingo a misa y además el año que yo empecé a ir a catequesis, ella se metió a catequista y ahí ha estado un montón de años.

Ella fue la que hizo que yo empezase como monaguillo y esto, unido a mi falta de vida social en la infancia, hizo que desperdiciase los fines de semana durante un montón de años. Iba a catequesis los sábados por la mañana, a misa como monaguillo los sábados por la tarde y cantaba en el coro infantil en la misa del domingo. Esto me sirvió para hacer algunos amigos en ese entorno, amigos que hoy en día o se han convertido en curas o han renegado de la Iglesia, como yo.

Lo que ahora voy a contar sólo lo sabe uno de los que hoy en día es sacerdote y es que durante mi infancia e incluso durante la adolescencia, yo tenía claro que acabaría en el seminario. Menos mal que no dí el paso, porque si ahora me arrepiento del tiempo perdido durante la infancia, podría estar arrepintiéndome de toda una vida perdida y eso sí que sería una lástima.

No quiero parezca que ahora tengo una crisis de fé. Que esa la superé hace ya muchos años y de forma nada traumática, por cierto, más bien fue toda una liberación. Simplemente me bastó abrir un poco el punto de vista y mirar a la Iglesia como institución, empezando por la cúspide de la pirámide, en lugar de quedarme sólo en las cosas de mi iglesia de pueblo y su cura, más o menos progresista.

Se podrían decir muchas cosas de los que están ahí arriba, de ese que se hace llamar Santo Padre, de toda la curia que le rodea, de aquel que los obispos españoles han elegido como representante y de muchos de esos obispos, pero prefiero no herir sensibilidades. Me conformaré con decir que dudo mucho que si hay un Dios ahí arriba y de vez en cuando echa un vistazo aquí abajo, la Iglesia que ve sea la que Él quisiera como representación suya en la tierra.

Muchas veces me he planteado el tema de la apostasía, sobre todo por dejar de figurar en sus estadísticas y que se dejen de llevar subvenciones por mí, que supongo que por cada indivíduo no sea mucho, pero tacita a tacita...

Soy consciente de que no se puede juzgar a toda una institución ni por sus dirigentes, ni por las ovejas negras que salen a la luz periódicamente. También valoro de forma muy positiva la acción humanitaria o de caridad que realizan algunos de sus integrantes en algunas situaciones, pero fuera de la Iglesia también se pueden llevar a cabo esas mismas acciones.

Porque disminuya la aportación que realiza el Estado, poco puedo hacer, así que lo que me queda es negarles mi aportación voluntaria ahora que toca hacer la declaración de la renta. Con mi X que no cuenten. En mi caso no sería como dice su eslogan "X tantos", más bien la culpa sería "X unos pocos" pero son los que ensucian el nombre.

lunes, 18 de abril de 2011

Érase la primera escapada del año

Este fin de semana hemos hecho la primera salida del año con la casa con ruedas.

El destino elegido ha sido el pantano Gabriel y Galán en el norte de la provincia de Cáceres, en concreto, a las puertas del pueblo de Granadilla. Y allí que llegamos el viernes por la tarde poco antes de que empezara a anochecer.

El objetivo del viaje era pasar un fin de semana de descanso en el campo, alejados de la civilización y sólo para nosotros dos. Y se ha cumplido casi del todo. Ha faltado estar un poco más alejados de la civilización, porque hemos tenido bastante compañía de pescadores, creo que furtivos, porque según había leído por internet, hasta mayo está prohibido pescar allí.

En concreto, el sábado se puso bastante cerca de nosotros un matrimonio que debía entender de pesca lo mismo que yo (uséase nada) porque se tiraron todo el día con la música a tope y no creo que eso haga que los peces se acerquen. Yo desde mi desconocimiento de la materia, me atrevería a decir que más bien lo contrario. Pero nada, que ellos estuvieron allí todo el día primero con Maná y para la hora de la siesta con Camela a todo trapo. Lo primero pase, porque Maná me gustan, pero estar en mitad de la naturaleza con Camela a toda pastilla pudo con nuestros nervios y decidimos que era un buen momento para salir a palear un rato con el kayak.

La rutilla con el kayak fue toda una aventura. Todo iba bien, habíamos bordeado toda la península en la que está el pueblo de Granadilla y habíamos llegado hasta una isla que hay en medio del pantano y en la que ÉL había desembarcado para explorar, mientras yo seguía sus pasos desde el kayak, hasta que un PSSSSSSSSSSS me alertó de que algo no iba bien.

Llegué hasta la orilla de la isla yo también y comprobé que efectivamente el kayak hinchable estaba perdiendo aire en una de las cámaras principales. Afortunadamente son 3 cámaras independientes y sólo 1 perdía aire, pero en ese momento no lo sabíamos, así que tocó volver a embarcar a todo correr y dirigirnos a tierra firme lo más rápido posible y lo más cerca posible del lugar de origen.

Al final conseguimos llegar al otro lado de la península de Granadilla del que habíamos salido, pero ya estaba entrando bastante agua y no era plan de tratar de bordearla, así que allí desembarcamos. Me tocó patear hasta la furgoneta, acondicionarla un poco para poder moverla y volver con ella hasta donde se habían quedado ÉL y el kayak. Al final el paseo en kayak fue una aventurilla de 5 kilómetros, pero con final feliz, sin tener que llegar a poner a prueba los chalecos salvavidas que siempre llevamos.
Anque todavía no lo he comprobado, creo que no fue un pinchazo. Me dejé el manómetro olvidado en casa, por lo que no pude medir la presión y la inflé un poco a ojo y creo que me pasé. Además la dejamos un ratillo al sol en la isla, así que terminó por sobrehincharse hasta que el aire encontró salida por algún sitio. Espero que no sea nada que un parche no pueda arreglar. Una vez pasado el susto, el finde siguió su curso normal.

Hay dos cosas que sólo hacemos cuando salimos de excursión con la casa con ruedas: leer y jugar a las cartas, pero no con las barajas típicas española o de póker, sino a juegos más o menos frikis de cartas. Lo aclaro porque yo estos juegos no los conocía (es lo que tiene que ÉL sea un friki) y he encontrado unos cuantos que me gustan (sobre todo uno que se llama Ciudadelas). En concreto en este viaje hemos probado dos nuevos y los dos nos han gustado: El pictureka (igual algo simplón para mi gusto) y el Monopoli (afortunadamente mucho más breve que la versión de tablero). Encima los pillamos de casualidad porque estaban a 2x1 en el toysarás (que ahora mismo no sé como se escribe).

El domingo, afortunadamente cuando ya habíamos desayunado y teníamos casi todo preparado para marcharnos, llegaron irrumpieron 3 ó 4 coches de familias, amigas entre ellas, que con todos los recovecos que tiene el pantano, decidieron que el mejor sitio para pasar su jornada de domingueros era alrededor de nuestra furgoneta, así que en cuestión de segundos nos vimos rodeados, por lo que decidimos salir de allí, antes de que montaran todo el tinglado de mesas y sillas que traían preparado. Y así llegamos a Madrid a primera hora de la tarde, un poco antes de lo previsto.

No ha estado mal el viaje y la verdad es que nos hacía falta dedicarnos un finde para nosotros solos. Ahora toca decidir a dónde ponemos rumbo en los próximos puentes de Semana Santa y del 2 de mayo. Si es que el tiempo nos lo permite, que parece que no está muy por la labor.

viernes, 15 de abril de 2011

Érase una cita

Ayer por la tarde asistí a un debate político traspasé por primera vez la pantalla de blogger y quedé con dos personas de este entorno.
Hacía un montón que no acudía a una "cita a ciegas", creo que la última fue en la que le conocí a ÉL (y ya hace casi 6 años de aquello) y la verdad es que la cosa me pilló un poco desentrenado.

Antaño sí que acostumbraba a tener encuentros con internautas desconocidos. Si me pongo a hacer memoria, creo que no sería capaz ni de poner cara a muchas de las citas que he tenido con gente de lo más variopinta. Citas salidas del IRC, chats, páginas de perfiles, messenger,... pero claro, aquellos encuentros tenían otro objetivo bastante distinto al de ayer.

Por aquella lejana época, aunque ahora reconozco que no era la mejor opción, yo andaba buscando al amor de mi vida y para ello las citas eran frecuentes. Algunas veces yo pensaba que la cita había salido bien, pero no volvía a tener noticias del citado. Otras veces era yo el que no veía el feeling necesario y el que desaparecía del mapa. Alguna que otra vez, aunque afortunadamente las menos, la cita iba tan terriblemente mal por las dos partes que acababa antes de tiempo y otras la cita nos llevaba hasta una cama. También hubo ocasiones en las que la cosa salía razonablemente bien para las dos partes como para animarnos a repetir en nuevas ocasiones.

Pero estaba claro que la cita de ayer tenía un objetivo distinto: Conocer a dos personas, de las que gracias a esto de los blogs, puedo conocer más cosas de su vida privada que sus más allegados y lo mismo a la inversa, pero sin más intención erótico-festivo-sentimental que ampliar el círculo de amistades. Esa para mí era la gran novedad.

Ya no recordaba lo que era esto de quedar con "extraños". La llamada o mensajes típicos de dónde estás, como vas vestido, ya te veo... ya digo que estoy desentrenado y lo noté, porque estuve bastante cortado durante toda la velada. También creo que era la primera vez que quedaba con dos desconocidos a la vez y encima ellos ya se conocían, por lo que entre ellos había más tema de conversación, pero la verdad es que me sentí muy bien acogido. Habrá que repetir, aunque a ÉL no le haga especial gracia.

Ya he dicho alguna vez que ninguno de los dos somos celosos, pero esto del blog le da rabia, sobretodo desde que cayó en la trampa que le preparé. Así que cuando yo esperaba un recibimiento en casa con la cena preparada, me encontré con la casa vacía. Porque ÉL había decidido hacer lo mismo que yo y quedar con un amigo. Al final cuando volvió y me preguntó por mis acompañantes y yo le contesté que uno tiene pareja y el otro es de derechas, ya se quedó más tranquilo.

Ahora, puestos a retomar cosas del pasado, me toca volver a usar el messenger, que sinceramente pensaba que con todo esto de las redes sociales, ya había pasado de moda. Empecé por agregar a los que tenía pendientes, para saludar más que nada y al final llegó ÉL y se estuvo hablando con uno de ellos mucho más tiempo que yo. Hay que ver cómo son estos frikis...

Y nada más, espero repetir con mis dos nuevos conocidos y con todo el que se quiera apuntar, que tengo que ampliar mi círculo social. Pero de momento, toca desconectar y escaparme a tener un finde de relax sólo para nosotros. No cuento más que luego se gafa. Ya a la vuelta os informo.

jueves, 14 de abril de 2011

Érase una guía de supervivencia: la sauna

Hoy toca una nueva entrega de la guía para maricas descarriadas. Después del enorme éxito de la primera que versaba sobre el apasionante mundo del cuarto oscuro, hoy toca adentrarnos en el no menos placentero mundo de las saunas.
Mi experiencia en saunas, a no ser que cuenten las del gimnasio, es mucho menor que la de los cuartos oscuros. Sólo conozco 4 y casi todas en la misma ciudad y además no hace mucho que entré en ellas por primera vez, pero creo verme capacitado para describir su funcionamiento.

La principal diferencia entre un cuarto oscuro y una sauna no es la iluminación como podría parecer, es la indumentaria. En el cuarto oscuro puedes ir más o menos como te dé la gana, mientras que en una sauna todo el mundo va uniformado, con sus chanclas y su toalla.

Los cuartos oscuros suelen formar parte de algún otro garito, ya sea club, pub, discoteca o incluso una sauna, mientras que las saunas son locales dedicados por entero a ello, así que lo primero que se hace en una sauna es pasar por caja. Bueno, mejor pensado, lo primero es buscar y pulsar el timbre para que nos abran la puerta.

En la taquilla, la principal pregunta a la que tendremos que responder es, como siempre, por el tamaño. Pero no penséis en lo único, que esta vez los tiros van un poco más abajo: los pies. Lo que el taquillero tras una mampara os preguntará es el nº de pie, para daros las chanclas correspondientes. Su utilización es muy conveniente para evitar contagios, que los hongos se llevan muy bien con la humedad y en estos sitios la humedad es muy poco relativa. Por supuesto, siempre os podéis llevar las vuestras de casa, si sois un poco escrupulosos con estos temas. Pero realmente si sois escrupulosos, casi mejor ni pulsar el timbre de la puerta.

Una vez que paguéis y le digáis al taquillero el nº de pie, os dará como mínimo, la llave de la taquilla con su nº correspondiente. Otras cosas que os puede dar el taquillero son: las chanclas, si no lleváis las vuestras propias; las vueltas, si no habéis pagado lo justo; el condón, si es que no tienen dispensadores por dentro del local; el sobrecito de lubricante, si es que no tienen dispensadores por dentro del local y si se lo pedís (con esto suelen ser algo ratas y a no ser que se lo pidas, no te lo suelen ofrecer); algún flyer de descuento y/o promoción para otro día; alguna tarjeta o ticket con código de barras, si es que el lugar tiene torno para pasar, como los del metro; y una o dos toallas, a no ser que las tengan ya dentro de las taquillas.

Así que toca retirarse de la ventanilla de la taquilla, para que no se forme mucha cola, haciendo equilibrios con todo eso en la mano. En caso de que el lugar tenga torniquete para entrar, tocará pasar por el lector el ticket o tarjeta que nos hayan dado y acceder al recinto.

Normalmente entras de lleno en el vestuario. Esto es como un gimnasio, pero con la diferencia de que no hay vestuario de tias, así que tranquilos que no hay posibilidad de que os hayáis confundido de puerta.

Una vez en el vestuario, llevando en la mano las cincuenta cosas que nos han dado en la entrada, toca mirar en la llave el número de la taquilla que nos han asignado y buscar por todo el vestuario hasta dar con ella. Todo eso sin distraernos contemplando la gente que se esté desvistiendo ante nuestros ojos, que para eso ya habrá tiempo.

Para localizar la taquilla, dos consejos prácticos: el primero es que a esta gente le gusta el orden y normalmente ponen la 2 junto a la 1 y a continuación de ambas la 3 y así sucesivamente y lo segundo, es que en la cabecera de cada fila de taquillas suele poner el primer y último número de las taquillas de esa fila. Todo muy práctico y bien pensado.

Cuando nos encontremos frente a frente con la taquilla, tocará despelotarse, ponerse las chanclas y anudarse a la cintura una de las toallas que nos han dado en la entrada o nos hemos encontrado en la taquilla. En este momento se suele dar una circunstancia que me llama mucho la atención, por lo ridícula que es, más que nada: la gente que se pone la toalla sin quitarse la ropa interior y hace equilibrismos para quitársela, como en la playa, vamos.

Puede que yo, que como ya he comentado más de una vez, hago nudismo, vea esto un poco ridículo, pero es que un minuto más tarde de hacer todos esos movimientos de contorsionismo para que nadie te vea el pajarito, todo el que pase te verá tal y como viniste al mundo en las duchas. Un sinsentido, vaya.

Retomando el tema, una vez que estemos uniformados de sauneros, toca cerrar la taquilla y guardar la llave como si nos fueran nuestras pertenencias en ello. Para eso, como sois observadores, os habréis dado cuenta de que la llave está unida a una goma, para que se pueda llevar colgando de la muñeca, biceps o tobillo, por este orden, en función de lo fashion que queráis ser.

Ya podemos salir del vestuario, pero conviene hacerlo por la puerta del lado opuesto al que entramos, claro. Si no acabaríamos en chanclas y toalla en mitad de la calle.

Ahora toca analizar las estancias comunes en una sauna: duchas, sauna seca, baño turco, cuarto oscuro, jacuzzi, piscina, barra, pista de baile y cabinas. Ya digo que conozco pocas y ninguna de ellas reune todo esto, pero vamos a ver la utilización de cada cosa.

Las duchas son obligatorias cada vez que queramos acceder a la sauna seca, baño turco, jacuzzi o piscina. Las que conozco son como las de un vestuario de equipos de un polideportivo, es decir una sala con muchas duchas sin separación entre ellas, así que esto no es apto para pudorosos. Esta bien para poder echar un vistazo a la mercancía antes de comprarla, siempre que la iluminación lo permita y tampoco es que lo permita mucho. En general, la iluminación de una sauna no llega al nivel de la de un cuarto oscuro, pero tampoco se queda muy lejos.

En las duchas se puede empezar con el tonteo del pre o post coito, con la tontería del yo te enjabono por aquí, tú me frotas por allá. Incluso hay quien se deja llevar por el momento y se lo monta allí mismo, a la vista de todos, pero no suele ser lo habitual. Y además, recordad que cada gota cuenta, que no está la cosa como para dejarse el grifo abierto.

La sauna seca, pues eso para sudar como un pollo. Suele ser el lugar de ponerse a tono, uno mismo o con ayuda externa, pero tampoco es el lugar más indicado para montárselo, ya que el calor ambiental sumado a la calentura del momento, pueden hacer que enseguida desfallezcamos. Una observación, si utilizamos tanto la sauna seca, como el baño turco, conviene hidratarse bien, con agüita, que el cubata para esto no sirve. Así que buscad una fuente, una jarra o pedirla en la barra, que siempre os darán.

El baño turco sí que suele ser el lugar para montarse la pasión ídem. Normalmente está mucho más oscuro que la sauna seca y la temperatura, aunque elevada, gracias a la humedad se lleva mejor. Incluso una de las saunas que conozco tiene un laberinto (como el de un cuarto oscuro, pero sin cabinas) dentro del baño turco, así que es el lugar indicado para el totum revolutum. La experiencia me dice además, que en el baño turco, a diferencia de la sauna seca, la gente tiende a despojarse de la toalla nada más entrar. Eso sí, procurad quedaros con ella al cuello o no perderla de vista, que como luego os pongáis la de otro, a saber por dónde habrá pasado.

En el baño turco la gente suele ir bastante a saco y te puedes encontrar con manos palpando lugares de tu cuerpo que ni tu conoces, pero si apartas una mano de tu cuerpo, por lo general no se vuelve a acercar. Para los pesados, con decírselo basta.

En el jacuzzi o piscina está prohibido practicar sexo y que no me entere yo que incumplís la prohibición. Que ascazo, por favor!! Estos lugares se han inventado para hacer piececitos y roces en general, antes o después de pasar a mayores. Prestad atención a donde dejáis las chanclas y la toalla, para no quitarle a otro las suyas después.

Una cosa que a mí me resultó curiosa es que en las saunas hay barra y en algunas hasta mesas y/o pista de baile. De hecho hay alguna sauna que parece más un pub que otra cosa, si no fuera porque todo el mundo va en toalla, claro. Pero ya se sabe que hay quien necesita el alcohol para deshinibirse un poco. Para reafirmarme en la opinión de que lo tienen todo muy bien pensado, os diré que para pagar las consumiciones no hace falta dinero, con enseñar la llave con el número de la taquilla ya te lo cargan a cuenta y lo pagas al salir.

Toda sauna gay que se precie tiene su cuarto oscuro, pero como sobre este espacio ya os hablé en la entrada anterior no voy a repetirme ya que el funcionamiento es similar, con la ventaja de tener menos ropa de por medio.

En cuanto a las cabinas, la diferencia que yo he encontrado entre las de los cuartos oscuros y las saunas que conozco es que las de las saunas suelen tener una colchoneta o camastro donde poder ponerse en posición horizontal, mientras que en los cuartos oscuros todo es en vertical. Además las de las saunas por lo general, están un poco más iluminadas.

Es más que recomendable que antes de tumbarnos pongamos la toalla como sábana-barrera entre la colchoneta y nuestro cuerpo, porque a saber lo que se ha podido hacer ahí antes de nuestra llegada (posiblemente lo mismo que nosotros vayamos a hacer).

Una ventaja de tener "cama" es que en los cuartos oscuros la gente espera a su presa en la puerta de la cabina, mientras que en las saunas la espera se hace cómodamente tumbados, con la puerta entreabierta y mostrando la mercancía, para que no haya sorpresas posteriores.

Y hasta aquí el repaso a las diferentes estancias de una sauna. Para salir sólo toca volver a darnos una duchita si hemos sudado; pedir una nueva toalla si sólo nos dieron una, para poder secarnos bien; aplicarnos alguno de los productos (de todo a 100) que ponen a nuestra disposición gratuitamente como body milk, colonia o gomina; depositar las chanclas y las toallas en el contenedor correspondiente y dirigirnos con la llave de la taquilla hasta la entrada, donde comprobaran si tenemos deudas pendientes de pagar de la barra y nos dejaran marchar libres.

Una última observación sobre las saunas, no he hecho ningún estudio que lo acredite, pero supongo que el 100% de los parroquianos será gay. Pero de todos esos gays, no todos van buscando sexo, ya que hay quien como yo (que ya he dicho que me encanta el agua), va buscando únicamente disfrutar de las instalaciones, distraer la vista un rato y/o relajarse sin más, por lo que no se suele ir tan a saco como en un cuarto oscuro, excepto en el propio cuarto oscuro de la sauna, pero si te metes ahí es para lo que es.
Y para rematar, la recomendación de rigor. Haced lo que queráis, con quien se deje, pero siempre sexo seguro. Máxime en este tipo de sitios.

miércoles, 13 de abril de 2011

Érase un par de premios

Hoy va de agradecimientos la cosa, ya que la semana pasada me entregaron un par de galardones y todavía no lo había celebrado como se merece.

El primer premio que recibí fue el de Stultifer, que me nombró blog del día. Según sus palabras, se debe a los contenidos y matices del blog y desde que lo leí, me sigo preguntando si no se habrá equivocado. Yo entiendo que es muy dificil tener que dar un premio a un blog diferente cada día y que esto haga que se acaben las opciones y los motivos por los que entregarlo, pero de ahí a resaltar mi blog por esos dos motivos... hay que tener mucha imaginación.

De cualquier manera, querido Stultifer, te agradezco el premio aunque venga con trabajillo. Ahora por lo visto me toca enviarle la foto de una escalera, así que me voy a tener que recorrer Madrid cámara en ristre (¿qué es un ristre?) para fotografiar este elemento al que, dicho sea de paso, nunca he prestado demasiada atención. Prometo cumplir con la tarea, pero no te aseguro cuando, que yo para esto de los deberes siempre he sido muy vago.
El segundo premio que me han otorgado es el de la amistad que creo que ya decora todos los blogs que sigo. En este caso me llegó de Kotei, "porque su blog tiene algo especial, no se que es, pero de alguna manera me gusta leerlo, me es sencillo, me atrae y no me cansa nada". Que digo yo que mérito tiene el chaval por no cansarse de mi blog, porque con las parrafadas que suelto... supongo que a estas alturas ya no es ningún secreto el hecho de que la concisión no es una de mis virtudes.

A pesar de que a estas alturas todo el mundo tiene ya el premio de marras, no he conseguido encontrar las normas por ninguna parte, así que aunque intuyo que me tocaría pasárselo a otros nosecuantos blogueros, pero como yo siempre llego tarde y ya todos lo tenéis, no es cuestión de que el premio siga andando en círculos por la red, por lo que por mi parte, muere aquí.

Con el rediseño de ayer, aproveché para colocar a la derecha una vitrina donde colocar los premios, que todavía no la tenía. Desde entonces los luzco orgulloso y, por supuesto, estoy esperando a que me lleguen nuevos, que siempre viene bien para rellenar un post sin chamuscar muchas neuronas, como el de hoy.

martes, 12 de abril de 2011

Érase una nueva cabecera by Thiago

Se suele decir que en casa del herrero, cuchara de palo, pues esto es lo que me pasaba a mí con el diseño del blog, que pillé una plantilla de las que ofrece blogger y no toqué nada, se quedó tal cual.

Tampoco es que sea diseñador gráfico, pero en la universidad sí que fui profesor de temas de multimedia, entre los que se incluía el diseño de webs y en el trabajo, entre otras cosas me toca hacer páginas web y como son para uso interno de los propios trabajadores (la intranet), pues el diseño nos lo tenemos que currar nosotros mismos.

Supongo que será por eso que cuando llego a casa lo último que me apetece es abrir el photoshop para crearme una cabecera.

Ha tenido que ser Thiago el que se las curre por mí, ya que un buen día recibí un correo suyo con un puñado de ellas con una cosa en común. En todas ellas había un bicho, más simpático o más horrible, pero siempre un bicho, así que como suele hacer él en su blog, podría publicar un "así me vio Thiago", donde la visión sería la de un bicho.

Comprendo que mi nick puede llevar a esa confusión, pero Bitxin no viene de la palabra Bicho, sino que tiene su lejano origen en mi propio nombre, aunque con los años ha ido degenerando bastante, hasta quedar irreconocible.

Con este post lo único que quería era agradecer a Thiago la creación de todas las cabeceras que me ha enviado (¿cuántas horas tienen tus días? porque a mí no me salen las cuentas) y daros a conocer el nuevo diseño, más a corde con la estación actual.
Voy a comprometerme a intentar cambiar el diseño con cada cambio de estación, aunque no sé si seré capaz de hacerlo.

En mis cabeceras, voy a tratar de evitar poner maromos de buen ver, como hace Pimpf, porque al final en el trabajo van a decir que me paso todo el día viendo chulazos. Tampoco quiero poner signos de ningún partido, como hace Kotei, al que delatan las gaviotas de su cabecera. Por supuesto que tampoco pondré fotos propias, al estilo de Z, porque él se lo puede permitir, pero creedme que si yo hago lo mismo os sangrarían los ojos, jejeje.

Así que con todas estas limitaciones, toca ir pensando en la cabecera del verano, para que no me pille el toro.

lunes, 11 de abril de 2011

Érase el resultado de los planes

Ya estoy de vuelta en Madrid. Como en la última entrada os hablé de los planes que tenía, hoy toca ver los que se han cumplido y los que no.

Tengo que decir que, aunque no creo en estas cosas, el blog tiene algo de gafe, porque normalmente no se cumplen las cosas que comento por aquí que voy a hacer, así que no sé si a partir de ahora, dedicarme a escribir las cosas únicamente a toro pasado.

Llegamos a casa a tiempo para pasar con mi madre esa última horita del día de su cumpleaños, aunque casi no llegamos a tiempo, porque nos tiramos como media hora para encontrar aparcamiento ¡¡en mi pueblo!!

Creo que nunca había visto el pueblo tan petado de gente, ni de coches a esas horas de la noche. Es lo que tiene el norte, que en cuanto suben un poco las temperaturas, las terracitas se abarrotan.

El viaje fue del tirón, porque quería llegar a tiempo, lo que me costó un enfado con ÉL, que tenía hambre y quería que parase en alguna gasolinera para comprar algo. A ver si esto le hace animarse a conducir alguna vez y así pararemos cuando ÉL quiera.

El sábado como estaba previsto, fui con mi prima a comprar sus patines, nuestro regalo para su primera comunión. De paso yo aproveché y me compré un neopreno para el kayak, que en Santander de estas cosas tienen más surtido y mejor precio que en Madrid. Luego nos fuimos con mis tíos a una terracita a comer uno de los manjares de mi tierra, las rabas, que para quien no las conozca diré que se parecen a los calamares de Madrid, pero sin punto de comparación.

En Santander había carteles por todas partes anunciando la apertura de uno de esos sitios donde compran los que no son tontos y que por aquí abundan, pero que allí es novedad. Anunciaban ofertas especiales por la apertura y a ÉL se le puso entre ceja y ceja que había que ir p'allá. Como ya habíamos tenido el enfado del viaje, decidí que esta vez me tocaba ceder y así pasamos la preciosa tarde que hacía: en un centro comercial :-(

Al salir, aunque faltaba poco tiempo para la hora a la que había quedado con mis amigos, nos acercamos hasta la Virgen del Mar, porque yo no puedo estar en Santander y no ver algún acantilado. Me encanta ver el mar rompiendo con todas sus fuerzas, pero esta vez estaba como un plato.

Aquí os dejo una foto aérea del lugar. Es una isla en la que está la hermita de la patrona de Santander, la Virgen del Mar y que está unida a tierra por una pasarela peatonal. Aunque no pisamos la arena, tiene una pequeña playa especialmente indicada para el snorkel (o como se escriba). Además tuvimos suerte porque el lugar no estaba nada concurrido. Tiene la ventaja de estar bastante apartado de la ciudad y que los turistas no lo hayan invadido.

Luego fuimos a la cita con mis amigos, pero al final sólo acudió mi amiga N y en estado algo resacoso... El resto de viaje, trabajando, de canguros o desaparecidos en combate :-(

Pues nada, decidimos que no se salía por Santander y en su lugar nos tomamos algo por el pueblo e hicimos un simpa pero inconscientemente, ya que todos pensábamos que ya estaba pagado. Al final también se presentó mi amigo M y estuvimos un buen rato de palique, poniéndonos al día de nuestras vidas.

Y el domingo por la mañana tocó visitar a mi abuela, hacer compra de viandas típicas para traer a los madriles: quesadas, sobaos, tartas de hojaldre... y comer... muuuuuucho...

Mi madre cada vez que voy allí más que alimentarme, me ceba y encima se debió levantar como a las 7 de la mañana para prepararnos comida para traer. Tengo la nevera y el congelador de casa hasta los topes. Creo que en un mes no tendré que cocinar. Creo que he vuelto a engordar los escasos kilos que había bajado desde que me puse a plan. Pero es que una madre es una madre y como muestra diré que a falta de una, había hecho tres tartas para nosotros, para celebrar el cumple.

En resúmen: el finde pudo dar más de sí, porque al final ni kayak, ni patines, ni playa, ni ambiente... pero nos lo pasamos bien y descansamos de la gran ciudad, que es lo que cuenta.

viernes, 8 de abril de 2011

Érase unos planes para el finde

Este finde, a diferencia de los anteriores, que han sido monotemáticos con la dichosa cocina, se presenta lleno de planes.

ÉL comerá hoy con su familia, porque es el cumple de su madre, luego se irá a clase y a las 6 de la tarde, cuando salga de clase estaré en la puerta de su facultad con la casa con ruedas, para ponerla rumbo a mi Santander del alma.
Espero llegar por lo menos para poder disfrutar con mi madre la última hora del día de su cumpleaños. Como habréis deducido, mi madre y mi suegra nacieron el mismo día.

Mañana por la mañana tocará ir con mi prima a comprar su regalo para la primera comunión, ya que me ha pedido unos patines y todos sus complementos y para eso necesito sus pies. Más tarde tengo varias opciones, todas ellas junto al mar, que es algo que en Madrid no puedo tener y que echo mucho de menos.

Puedo irme con ella a estrenar sus nuevos patines, que para eso me llevaré yo también los míos, por un carril bici que bordea al aeropuerto y que pasa junto al mar.

Si no quiere estrenar los patines todavía, otra opción es irnos a surcar la preciosa bahía que tenemos con el Kayak, que también me lo llevo desde aquí. Aunque para eso intervienen otros factores como la temperatura ambiental, la del agua y el estado de la mar. Nunca hemos navegado por mar, siempre ha sido por ríos o pantanos y me apetece probar.

Con el buen tiempo que creo que hace estos días por mi tierra (espero que no cambie en cuanto lleguemos, que no sería la primera vez) otra opción más descansada sería ir a la playa. Ya veremos lo que hacemos al final.

Por la tarde tocará café con mis amigos. Al final no nos juntamos todos, ya que LA y su marido NX justo este finde se vienen para Madrid. Hay que ver la falta de sincronización que tenemos. Por lo menos espero contar con: LB, N, M, JF y B. Con el café nos pondremos al día de nuestras vidas, ya que por la noche, si salimos de fiesta, no es el mejor momento.

Por la noche, espero disfrutar del escaso ambiente santanderino y a ver si esta vez no acabamos como la última, jugando al escondite con mis amigos y ÉL por el cuarto oscuro. Porque la gente se mosqueó bastante con nosotros (y con razón) y casi nos echan.

Y el domingo, si santa resaca lo permite, tocará ir a ver a mi prima montar a caballo. No es que me apetezca mucho el plan, pero a ÉL le encantan los animales y así por lo menos puede dedicarse a acariciar a los caballos.

Mi prima es la típica niña a la que sus padres apuntan a todo tipo de actividades extraescolares. Creo que ahora mismo hace: Gimnasia rítmica, baile, pintura, equitación, manualidades, costura y seguro que me dejo alguna. Lo peor de todo es que sus padres son los típicos coñazos con "ven a ver como mi hija..." Y como es la única niña de la familia pues allá que vamos todos a sus campeonatos de gimnasia, sus exhibiciones de baile y a todo lo que nos pidan. Además ella siempre me dice que soy su primo favorito y con eso ya me tiene ganado. Realmente de lo que ejerzo con ella es de tío, ya que por las circunstancias nunca tendré sobrinos ni propios, ni políticos.

Y después de todo esto, rumbo de nuevo a Madrid. A la vuelta os contaré lo que finalmente he hecho, de todos los planes que llevo. Porque tengo la sensación de que poner por aquí las cosas a futuro, me las gafa un poco.

Y una última cosa, la semana que viene prometo agradecer como se merecen los premios que he recibido esta semana, pero es que hasta ahora no he tenido tiempo.

Un beso para todos y feliz fin de semana!!

miércoles, 6 de abril de 2011

Érase la llegada de la primavera

Me encanta la primavera, pero no la que conozco de Madrid, sino la bucólica de mi infancia, la que hace florecer a las plantas (se nota que tengo la suerte de no ser alérgico) y la que dicen que hasta altera la sangre.

Yo asocio la primavera con los días que se van haciendo más largos, sobretodo a partir del cambio horario y las temperaturas que van aumentando, pero sin llegar hasta los extremos del verano. Pero lo más importante es que lo asocio a un tiempo de transición GRADUAL del invierno al verano.

Así al menos es en el norte, pero en Madrid todo va más deprisa, hasta los cambios de estación. Las primaveras que he vivido aquí hasta ahora consisten en la alternancia de días de verano y días de invierno, hasta que finalmente estos últimos desaparecen.

Es un momento en el que no sabes qué ropa ponerte por la mañana, porque puedes acabar asado como un pollo o pelado de frío. Supongo que por eso se inventó el refrán de hasta el 40 de mayo no te quites el sayo, aunque no tengo muy claro qué es eso del sayo exactamente, supongo que el equivalente de nuestros días sería la cazadora de entretiempo o como lo llaman las modernas, de fondo de armario.

Y por la noche más de lo mismo, unas noches acabas sudando entre la manta y el pijama (el que lo use, que yo no) y a la noche siguiente decides quitar la manta y acabas con el catarro típico de haber dormido con el culo al aire.

Pero eso era otros años, porque parece que este año vuelve la primavera al Corte Inglés a la Comunidad de Madrid. Hay que ver el día que tuvimos ayer, de agradable solecillo y con la justa medida de calor y tiene pinta de que esto se va a mantener durante los próximos días.

Ayer estuve por el parque que hay enfrente de mi futuro hogar y parece que todo el mundo estaba preparado para recibir al buen tiempo, menos yo. Daba gusto ver a la gente (a unos más que a otros, claro) todos con sus camisetas de manga corta y/o pantalones cortos, empezando a lucir carne. Y ahí estaba yo, con mi pantalón largo, camisa de manga larga y cazadora de invierno de la moto. Todo un despropósito que habrá que corregir hoy.

Estoy deseando salir del trabajo para ir a casa a cambiar el look de trabajo por uno mucho más primaveral y largarme al Retiro a patinar tratar de mantenerme sobre unos patines y, de paso, alegrarme un rato la vista. Espero que no demasiado, que ya me pasó una vez que por quedarme embobado mirando el culo de un tío, metí el patín en una alcantarilla y acabé besando el suelo.

Y es que si yo soy normalmente un poco salido, esta época del año ya es el no va más. Parece que la gente está deseando lucir palmito, ya sea para coger color (algo que a mí no me sucederá en la vida, porque como mucho paso del blanco mortecino al rojo alemán en Mallorca y vuelvo al blanco) o para demostrar lo que se lo han currado en el gimnasio (me niego a utilizar la palabra gym) durante el invierno.

En cualquier caso, me alegro que sea así, que por lo menos me entretengo a la vez que hago deporte (o lo intento). Espero no tener que escribir mañana que me he roto alguna extremidad del cuerpo. Y si alguien se apunta, que lo diga.

martes, 5 de abril de 2011

Érase una guía de supervivencia: el cuarto oscuro

Después de leer las dudas de Parmenio sobre el procedimiento a seguir en un cuarto oscuro, me he decidido a publicar una serie de guías para maricas descarriadas que quieran sobrevivir en determinadas situaciones.

El primer número de este coleccionable va sobre los cuartos oscuros. Quede claro que lo que voy a poner es todo de oídas, ya que yo nunca pisaría uno de estos antros :-P 
Las oídas son en concreto sobre una decena de lugares, de diferentes ciudades, que me permiten pensar que más o menos son todos iguales y se sigue en ellos el mismo procedimiento.

Lo primero que me gustaría resaltar sobre el Cuarto Oscuro es que el nombre lo han puesto por algo: está oscuro. Y siguiendo con las deducciones: no se vé. Esto se agudiza todavía más en el momento de entrar desde una estancia con más luz, aunque las discotecas, bares o garitos varios en los que suelen estar tampoco es que se caractericen por un exceso de luz, pero sí la suficiente para tener que darle un tiempo a nuestras retinas a que se adapten a la nueva oscuridad.

Es por ello que conviene entrar con calma y quedarse un ratillo pegados a la puerta (por si tenemos que huir cuando todavía estemos ciegos) esperando a que nuestros ojos empiecen a distinguir las siluetas en la sombra.

Estos lugares suelen estar a su vez divididos en varias estancias y las más comunes que nos podemos encontrar son: cine, laberinto, cabinas, sala diáfana, mazmorra o baño.

El cine está claro lo que es, pero no esperéis ver proyectada la última obra del cine independiente kurdo, a no ser que los actores vayan en pelotas y se pasen la película dándole al tema. Esta sala suele ser la más iluminada de todas, con la propia luz del proyector o de la tele. Está indicada para tantear a los parroquianos del lugar, para hacer tiempo hasta que localicemos alguna presa o como lugar de descanso entre búsqueda y búsqueda. En esta sala también se pueden tratar de establecer conversaciones, ya que en el resto del recinto el silencio suele ser sepulcral. Otra opción es llevarnos aquí al ligue de turno después de la faena, para poder verlo con algo más de luz, pero hay que avisar que no hay una UVI móvil en la puerta. Y que lo hecho, hecho está.

Ojo con el laberinto, que también está bien definido con su nombre. Puedes perderte tú, perder el norte o perder tus pertenencias. El laberinto son una sucesión de pasillos más o menos revirados y con cabinas a los lados. En este punto podemos tomar dos roles: ser de los paseantes o de los que esperan apoyados en la puerta de alguna cabina.

Suele estar bastante oscuro, así que no sirve para ligar la técnica de las miradas. Aquí lo que vale es el tacto. Puedes tocarte tu, tocar a otros o ser tocado. Los toques van desde el contacto casual al pasar (aunque haya un metro y medio de ancho, se chocan contigo al pasar y no es casual) hasta encontrarte una mano que te soba el culo o tantea el paquete. Normalmente los que tocan son los que estan apostados a los lados y los que son tocados son los paseantes.

Para demostrar tu interés por alguien basta con pararse a su lado o devolverle el toqueteo. Otra opción menos invasora es tocarte tu al paso de alguien o ver si alguien se está tocando a tu paso, entonces basta con continuar la faena que el otro estaba haciendo.

Para rechazar a alguien sólo hay que seguir caminando si estabas haciéndolo, cambiarte de lugar si alguien se ha puesto al lado tuyo o si te están sobando, retirar su mano sin brusquedades, pero con decisión.

No obstante, aunque no es normal que alguien se ponga especialmente pesado, siempre se puede hablar y decirle al pesado claramente que no nos interesa.

Desde que entró en vigor la ley antitabaco no he vuelto a pisar un sitio de estos (ah no, que habíamos quedado que nunca) así que no sé si la técnica del mechero ha cambiado, pero antes era imprescindible llevar uno, aunque no se fume. En la oscuridad es muy útil para pegar un fogonazo ocasional y poder ver claramente si tu objetivo realmente es el jovenzuelo que parece o es un abuelo que le ha robado la ropa a su nieto, que hay que ver el poder de camuflaje que tienen algunos en la oscuridad.

Hay quien hace eso mismo con la pantalla o el flash del móvil, pero a mi no me convence dar pistas sobre lo que llevo encima. Porque esa es otra, mucho ojo con los robos. Que en estos sitios nos relajamos mucho y entre toqueteo y toqueteo hay alguno al que se le puede quedar tu cartera enganchada.

Una vez localizado el objetivo en los pasillos del laberinto, al igual que si somos nosotros el objetivo de alguien, lo normal es pasar a una de las cabinas, echar el pestillo (ojo a donde está el pestillo y a cómo se vuelve a abrir, que más adelante será necesario recordarlo) y allí dentro ya no sé lo que suele ocurrir. Eso sí, todo se hace de pie y procurando no tocar demasiado las paredes, que a saber lo que te puedes encontrar. En estas cabinas es raro que haya camastros.

En las salas más diáfanas, la oscuridad y el silencio son totales. Aquí lo único que se puede llegar a distinguir son siluetas y lo máximo que se oye son gemidos, atragantamientos u otros ruidos similares procedentes del fragor de la batalla. En estas salas lo normal es encontrarse un totum revolutum al que poder sumarse en un momento dado. El problema es que cuando lo inicias tu, también se te pueden sumar y no siempre interesa.

En caso de que haya bancos, antes de sentaros observad la altura a la que quedáis si lo hacéis, ya que lo normal es quedar a la altura del paquete de alguien que esté de pie, con lo cual ya podréis deducir cuál es la función de los bancos y cuál el rol del que se sienta y cuál la del que se queda de pie.

Prestad también atención a posibles agujeros en la pared. No porque haya riesgo de desprendimiento del edificio, sino por lo que llegado el momento puede emerger por aquel agujero. No vaya a ser que os llevéis un pollazo imprevisto.

En función del tipo de garito en el que esté el cuarto oscuro, pueden existir salas de juegos, pero no penséis ni por un momento en piscinas de bolas (aquí las bolas se llevan colgando). Lo más parecido a estas salas son las mazmorras con aparatos de la Inquisición: columpios, celdas, inmovilizadores y demás artículos fetichistas.

También conviene asegurarse del tipo de baño que tiene el cuarto oscuro, ya que a veces es mejor salir al del garito o incluso hacérselo encima. Y es que lo de los baños también tiene su morbo para algunos, así que os podéis encontrar desde urinarios transparentes a humanos. No digo más.

Hasta donde yo sé (que ya sabéis que es de oídas), no se paga nada a parte por acceder al cuarto oscuro. Lo que se puede pagar es por entrar al garito en sí mismo o si la entrada es libre, te pueden obligar a acceder al cuarto oscuro con una consumición.

Otro punto sobre el que prestar atención es el horario de cierre del lugar. En función del sitio, pueden anunciar el cierre bajando la música, dando un aviso por la megafonía o con un breve relampagueo de las luces del cuarto oscuro (que aunque estén apagadas, tiene luces). Es hora de no hacerse los remolones y acabar la faena en el punto en el que esté, porque tras esto dan un BREVE tiempo de cortesía y encienden del todo las luces y creedme si os digo que no es agradable ver aquello con luz. Y menos si os encontráis (como me ocurrió en cierta ocasión) a vuestro mejor amigo en la posición más deshonesta que se os pueda ocurrir y con los pantalones por los tobillos.

Y una última cuestión, que será común en todas las guías. Haced lo que queráis, con quien se deje, pero siempre sexo seguro. Máxime en este tipo de sitios.

lunes, 4 de abril de 2011

Érase un lunes

Hoy es lunes pero no soy de esas personas que odia profundamente a este día de la semana, por ser el primero.
Es el día de la vuelta a madrugar, aunque en mi caso, he madrugado durante el sábado y el domingo para continuar con la reforma del piso.

Es el día en que se deja atrás la semana y podemos hacer balance. Y para mí, el balance de la semana que ha terminado es el del fin de la reforma de la cocina. Ya hemos montado lo que faltaba: la encimera, el fregadero y la vitrocerámica. Y afortunadamente ha quedado todo bien.

Es el día en que comienza una nueva semana, cargada de oportunidades. En concreto, si no se gafa, será la semana en la que nos encontraremos en Santander todos los amigos y eso es una coincidencia tan inusual como el perfecto alineamiento de los planetas.

En definitiva, es lunes y estoy feliz, ya veremos si el resto de días van viniendo de la misma manera.

viernes, 1 de abril de 2011

Érase una trampa

... pero no puedo hablar de nada de eso, entre otras cosas porque no lo hago.

Este post es la continuación del de ayer, por eso el de ayer terminó con unos puntos suspensivos. Supongo que os sorprendería lo que ayer conté, pero realmente era una trampa para ÉL. Os pido disculpas por haber sido víctimas colaterales del engaño.

La cosa es que cuando al poco de empezar a escribirlo, ÉL lo descubrió cotilleando por mi ordenador, le hice prometerme que no lo leería, para darme la libertad de escribir libremente mis historias, pero yo tenía la impresión de que sí que lo leía, así que quería estar seguro.

Y ya lo estoy, por supuesto que lo lee, aunque creo que con las horas que ha pasado, definitivamente se le han quitado las ganas de seguir haciéndolo.

Bueno, tan poco es tan raro lo que conté, ya que en un momento u otro de mi existencia he hecho cosas de esas, pero os aseguro que últimamente mi vida es de lo más monacal.

La verdad es que no me importaría volver a las andadas, pero siempre con ÉL, buscando alguna situación morbosilla que le ponga algo de sal a la vida, pero aunque lo hemos hablado alguna vez, parece que no acaba de dar el paso y lo respeto.

Muchas veces lo he pensado y hay que ver la de opciones de este tipo que tenemos los gays: cruising, saunas, clubes, cuartos oscuros,... Creo que las lesbianas (y mucho menos los heteros) no tienen estas facilidades. Está claro que para follar, los gays lo tenemos mucho mejor montado. Es una pena que todo provenga de cuando tiempo atrás había que desfogarse en la clandestinidad de los cuartos oscuros, por obligación, para no reconocer ni ser reconocidos. Hoy ya no existe esa obligatoriedad del anonimato, pero se mantiene el morbo de la situación.

Me revientan los estereotipos, aunque yo soy también algo dado a utilizarlos, en este caso el de la promiscuidad del colectivo. Seguro que hay de todo. Seguro que muchos de vosotros nunca habéis pisado un antro de estos y seguro que algunos otros sí (aunque todos digáis lo contrario XD).

Y nada más, una vez aclarado el entuerto, me despido por esta semana, porque si sigo escribiendo sobre el tema puedo acabar desvariando demasiado, porque se me vienen a la cabeza demasiados subtemas.

Feliz fin de semana al que lo pueda disfrutar, que yo seguiré encerrado en casa terminando de montar la cocina.